Somos la madre que te alimenta de sus senos
y te arropa en las noches frías.
Somos la niña que te miraba en la escuela
ofreciéndote una sonrisa cálida.
Somos la adolescente que te prestó su labios
llenos de fuego para el primer beso.
Somos la portadora de la primera mujer
que te regaló su vagina para encontrar placer.
Somos la primera mujer que te enseñó
lo que es dar la vida entre sus piernas,
la primera mujer que te regaló ese milagro
al que llamamos VIDA.
Somos las manos de tu abuela
tejiendo una bufanda para las mañanas frías
y cocinando un rico caldo
para recibirte los domingos.
Nosotras somos la mujer que duerme a tu lado,
que es la compañera, la amante, la consejera,
la administradora, la secretaria,
la cocinera, la enfermera ...
Somos todo en una sola vida.
Nosotras no merecemos las lágrimas,
ni los gritos, ni los insultos.
No merecemos la primera bofetada,
ni el primer golpe.
No merecemos la MUERTE de tus manos,
preferimos tus caricias, tus abrazos.
Nosotras te amamos, te dimos hijos,
te dimos nuestra vida,
pero no te dimos el derecho
de esclavizar nuestras vidas
y torturarnos hasta llevarte
nuestro último aliento.
Nosotras somos las portadoras
de la sangre que da la sangre,
de la continuidad humana,
portadoras de la mano que mece la tierra.
Y por todo ello,
HOY LEVANTAMOS EL VUELO
porque todas juntas,
SOMOS UNA SOLA VOZ,
porque cuando la sangre de una mujer
es derramada,
la tierra sangra por ella.