Porque nuestro paso por la vida no es eterno, porque todos necesitamos afecto y cordialidad, porque cada uno de nosotros somos distintos, y tenemos los mismos derechos:
Trata a los demás como deseas que los demás te traten a ti.
¡Nuestro mandato es de AMAR, no JUZGAR!
Feliz y Bendecido Martes tengamos todos.