Abraza la soberbia que hay en ti, porque detrás de ella hay una niña no querida.
Abraza la exigencia que hay en ti, porque detrás de ella hay una niña que no ha sentido Amor.
Abraza la “complaciente eterna” que hay en ti, porque detrás de ella hay una niña rechazada.
Abraza la ira y el enojo que hay en ti, porque detrás de ella hay una niña abandonada.
Abraza a la solitaria que hay en ti, porque detrás de ella hay una niña excluida y discriminada.
Abraza el desgano, la apatía, la falta de sentido, porque... detrás de todo esto, está tu niña padeciendo ser quién no es...
Abraza el dolor que hay en ti, porque detrás de él hay una niña lastimada.
Las niñas que habitan dentro de nosotras, están empezando a manifestarse y esta vez no pararan hasta ser escuchadas...
Por favor, desde lo más profundo de mi corazón te pido, no las silencies más...
Aprender a integrarla, a comprenderla, a abrazarla, a liberarla, devolverla a la vida, esta es la tarea de hoy.
Te aseguro que es el Camino para que tu Divinidad baje a la Tierra.
Clarissa Pinkola Estés