Cuando todo esto pase, no te quede duda, arriésgate… besa mucho, perdona rápido, cierra ciclos, pide perdón, sonríe más, quéjate menos, baila, relájate, deja de andar de prisa, disfruta a tu familia, bebe con calma tu café, saborea los postres, disfruta las caminatas, observa más el cielo.
La vida no te está pidiendo mucho, solo que la valores.