Nunca me sentí tan bien
como cuando solté lo que
me pesaba, cargas que
nunca debieron ser mías...
Y veme aquí, imparable,
aguerrida, y hecha una gata
que saca las uñas para
defender sus sueños e ideales,
a costa de quedarse sola,
porque ya no dejo que nadie
me diga que puedo o no
hacer. Soy esta mujer, dueña
de mi vida, de mis decisiones,
sean buenas o malas, pero son
mis decisiones no las tuyas.
como cuando solté lo que
me pesaba, cargas que
nunca debieron ser mías...
Y veme aquí, imparable,
aguerrida, y hecha una gata
que saca las uñas para
defender sus sueños e ideales,
a costa de quedarse sola,
porque ya no dejo que nadie
me diga que puedo o no
hacer. Soy esta mujer, dueña
de mi vida, de mis decisiones,
sean buenas o malas, pero son
mis decisiones no las tuyas.