La primera lección que la vida nos enseña y que deberíamos aplicar el resto de ella es a luchar para salir adelante...
Que lleguemos a este mundo llorando no significa que tengamos que permitir que nada ni nadie nos vuelva a hacer llorar, a menos que lo hagamos de felicidad...
Ríe, vive, disfruta de lo que la vida te ofrece, permítete cometer errores ya que de todo se aprende y te ayuda a crecer como persona, llora lo justo, porque es inevitable a veces hacerlo...
Pero siempre, siempre, siempre, quiérete, mímate y sé fiel a ti mismo, que nadie te robe tu identidad y tu personalidad...
Sé honesto contigo mismo y si encuentras algo o alguien que te haga feliz, cuídalo, protégelo y disfrútalo, lo mereces...