Las lágrimas tienen nombre.
Cada lágrima que derramamos, cada lágrima que asoma esquiva o brillantemente alegre, cada lágrima que corre por nuestras mejillas con libertad o se resbala lentamente.
Cada lágrima tiene un nombre.
Esa lágrima que salta de emoción, que es sentimiento en puro estado, ésa tiene un nombre... Amor.
Las lágrimas de risa, de las que te duele la barriga, que no puedes controlar, esas también tienen un nombre... Alegría.
Las lágrimas que acuden de pronto a tus ojos porque algún recuerdo bonito o triste los hicieron inundar, tienen nombre... Nostalgia, Recuerdos...
Las de rabia, tristeza y desolación, las que nos hacen romper en sollozos y nos parten el corazón...
Esas no deberían tener nombre.