Y yo sé muy bien que hay días como este, en qué te sientes muy triste, y el corazón pesa y la nostalgia te abraza.
Y sé que te sientes sola, te sientes rota, fría, desolada.
Y sé que hay veces en que se te apaga la sonrisa y te faltan las palabras.
Y estoy consciente que a veces crees que este juego se pierde, que te falta valentía, fuerza, alegría.
Y te miro y hay dolor en tu pecho, y ni las lágrimas se asoman, y flotas en el limbo de una dolorosa agonía, que no sabes dónde comienza, mucho menos donde termina
Y yo sé muy bien que darías cualquier cosa por volver a ser niña, encontrarte entre las paredes de tu casa a salvo, con los tuyos, entre la taza de café, las galletitas y la vida.
Por eso te pido que seas fuerte, envuélvete en tu rebozo y cuéntale tus penas, escóndele entre los hilos tus tristezas, enrédate bien fuerte hasta que los pedazos de tu alma se hayan unificado, y por las rendijas que quedaron vuelvan a colarse tus dichas y tus sueños...
Enciende el fogón y mientras el té de canela hierve, repite en voz baja mirando al abuelo fuego: Esto también pasará...