Ahora que voy a dormir, te pido que sigas actuando y que me permitas tener un pensamiento nuevo, un sentir nuevo que me haga ser un verdadero cristiano para Ti. Hoy te pido que me ayudes a conocerme cada vez más, a aceptarme como soy y, sobre todo, a amarme para poder vivir tranquilo y feliz con lo que soy y puedo hacer. Te alabo y te bendigo porque sé que mientras duermo estarás actuando en mi vida y me estarás llenando de tu amor.
No me abandones, porque sin Ti nada me funciona bien. Gracias por darme la luz en medio de tantas oscuridades. Gracias por llevarme de la mano para que mi corazón no se pierda en medio de tantas emociones extrañas. Confío en tu presencia y en tu Palabra, sé que en ningún otro lugar podré estar mejor. Te confío mi descanso y te pido que me ayudes a estar preparado para seguir adelante. Te amo y confío en tu poder protector. Amén