Ser mujer es un regalo de Dios.
Nacieron hechas para resistir tormentas,
para resplandecer aún en la oscuridad,
paridoras no sólo de hombres y mujeres, sino también de propósitos, son capaces de edificar una casa sin siquiera tener un ladrillo.
Fueron dotadas de dones y virtudes que las hacen únicas.
Dan la seguridad que su familia necesita, tienen la habilidad de dar vida con solo una palabra de sabiduría.
El valor de una mujer no se podría medir, es incalculable, no se mide por lo que tienen en bienes sino en sus cualidades.
Decir mujer, es decir está capacitada para llevar una familia, negocios, dar a luz,
caerse y al instante levantarse,
y como no? Su fuerza y honor son sus vestiduras, se ríen del por venir, porque su confianza no radica en lo que ven sino en quien creen...
Santy Cervantes
Nacieron hechas para resistir tormentas,
para resplandecer aún en la oscuridad,
paridoras no sólo de hombres y mujeres, sino también de propósitos, son capaces de edificar una casa sin siquiera tener un ladrillo.
Fueron dotadas de dones y virtudes que las hacen únicas.
Dan la seguridad que su familia necesita, tienen la habilidad de dar vida con solo una palabra de sabiduría.
El valor de una mujer no se podría medir, es incalculable, no se mide por lo que tienen en bienes sino en sus cualidades.
Decir mujer, es decir está capacitada para llevar una familia, negocios, dar a luz,
caerse y al instante levantarse,
y como no? Su fuerza y honor son sus vestiduras, se ríen del por venir, porque su confianza no radica en lo que ven sino en quien creen...
Santy Cervantes