“A ella debes quererla cuando sonríe pero debes de quererla aún más cuando está triste.
No seas como la mayoría que la desea sólo cuando se maquilla o cuando se pone un escote.
Si eres capaz de aguantar sus malos días, eres merecedor de sus mejores besos y de sus más deliciosas caricias”.
—Luis Alvarez.