Hay una historia acerca de un sabio al que en una ocasión le pidieron que maldijera a otro hombre. Al sabio se le dijo que la persona en cuestión era malvada y quería hacer daño a quien se atravesara en su camino. El sabio respondió: "En lugar de maldecirlo ¿no sería más fácil bendecirlo y que sólo vea la Luz? Si puede sólo ver la Luz, el resto se arreglará por sí solo ¿no es así?".
¿No es así? Sí, así es. Hoy, bendice a la gente que quieres maldecir. No puedes combatir a la oscuridad con oscuridad. Tienes que combatirla con Luz.
El amor surtirá efecto siempre.