Una mujer como yo, no tiene miedo de que la cambien por otra si tiene miedo de la mentira, del engaño y la hipocresía.
No le da miedo quedarse sola, sólo lucha por ser feliz, por luchar día a día para conseguir sus sueños, que aunque parezcan de fantasía, son sus grandes anhelos.
No cariño... No te equivoques, una mujer como yo; jamás te pedirá que te quedes si lo que quieres es irte, te acompañará a la salida y te deseara lo mejor si ya no quieres estar en su vida.
Una mujer como yo, ríe, disfruta, llora cuando tiene que hacerlo, ama tan intensamente que si tú eres el que está en su corazón... Te doy un consejo; no lo desaproveches.