Sentirse feliz no es lo mismo que serlo. Lo primero se trata de momentos puntuales, alegrías momentáneas que al cabo de un mes ya han pasado desapercibidas. Lo segundo trata de una manera de vivir la vida, de tu actitud con los que te rodean que hace mejores a ellos y mejores a ti.
Ser feliz no es un icono, no es una tendencia, no es una moda, es algo que vas creando desde que comienzas a vivir y que no, no se estropea fácilmente. Un mal día no te quita la felicidad, ni un mal examen, ni un accidente. Y pueden haber malas situaciones, porque las habrá pero ser feliz es una actitud que sólo depende de ti.
Porque a pesar de todo, la vida puede ser maravillosa.
Hermoso martes amigos.