La magia de ser mujer después de los 40...
Ya no tenemos la figura de los 20 años, pues las piedras del camino han moldeado nuestro cuerpo. Nuestra mirada es cómplice, pues se ha formado durante años .
Acumulamos de manera perfecta la experiencia y la juventud,
lo que nos hace dominar el arte y el manejo de nuestra esencia, sumando vida a los años que hemos disfrutado y que nos quedan por disfrutar.
Porque una mujer de más de 40 deja huella por dónde camina, haciéndose dueña de sus pasos. Siente que pisa fuerte, transmite seguridad en sí misma y ha logrado una estabilidad y un equilibrio emocional y personal que hipnotiza.
Se necesita mucho valor para amar a las mujeres marcadas por el pasado, aquellas de carácter fuerte pero de corazón bueno.
Se necesita mucho amor para curar las heridas y las desilusiones.
Pero, sobre todo, se necesita ser inteligente, porque son tan maduras que ya no creen en lo que sienten, sino en lo que estés dispuesto a hacer por ellas.