google.com, pub-5586298736741103, DIRECT, f08c47fec0942fa0 Sueños de Amor Y Magia

jueves, 27 de febrero de 2020

No te canses de hacer el bien


No te canses de hacer el bien,porque aquel que da sin esperar nada a cambio.
Todo lo que siembra un día lo cosechará en abundancia.

Asumir El Error.


Asumir El Error.
A través de nuestros errores tenemos la oportunidad de reflexionar y aprender algo nuevo. Cuando revisamos las consecuencias de una acción que acabamos de realizar, es cuando podemos reconocer el error que cometimos. Debido a esto, nos resulta tan difícil prevenir algunos errores, porque sólo podemos reconocerlos una vez que los hemos cometido.
Desarrollar la capacidad de reconocer y aceptar nuestras equivocaciones amplía nuestra visión de la realidad, nos impulsa a asumir nuestra responsabilidad y nos enseña, además, a reconocer la presencia de personas afectadas por las consecuencias de nuestras equivocaciones.
Oímos a diario frases como: “Cometer errores es humano”, “Un error lo comete cualquiera”, etc. pero, lo más importante, es que tengamos la disposición de asumir el compromiso de hacer cuanto sea necesario para corregirlos. Algunos padres, por ejemplo, temen reconocer un error frente a sus hijos por miedo a perder su autoridad o el respeto por parte de ellos, cuando, en realidad, hacerlo sería una señal de sabiduría, humildad y amor.
Desde luego que no es sencillo aceptar nuestras equivocaciones, pues hiere nuestra autoestima. A veces nos da pena que otros descubran que hemos cometido un error; otras, quedamos paralizados por el miedo de volvernos a equivocar, o también puede suceder que en vez de asumir nuestra responsabilidad y reparar nuestros errores, busquemos culpar a alguien de ellos. En realidad, saber que tenemos derecho a equivocarnos y estar dispuestos a aprender de ello, nos da la libertad de ser auténticos, de tomar decisiones más acertadas y nos concede el permiso para atrevernos a realizar actividades nuevas con más seguridad y confianza.
En algún momento, nos llegará el día en que hemos cometido un error grave, pero, a pesar de la vergüenza que podamos sentir, no debemos huir de la responsabilidad ni ponernos agresivos o defensivos cuando otros nos hagan una observación al respecto; nuestra meta deberá ser, en ese momento, tratar de reparar el daño de la forma más digna posible. Muchas personas creen que reconocer un error puede ser una señal de debilidad y que, además, puede representar la posibilidad de perder el respeto por parte de los seres queridos… ¡No es así! Definitivamente, el admitir que nos equivocamos nos merece el aprecio y la estima de ellos, especialmente si nos ven hacer el esfuerzo para superarlo y no repetirlo. Asumir nuestros errores nos permite crecer y madurar internamente. Además, todas las equivocaciones son una oportunidad para aprender algo nuevo acerca de nosotros mismos, de los demás y de la vida.
Hay dos maneras simples de aprender y madurar: lo hacemos por error y acierto, reconociendo y asumiendo las consecuencias que se generan de nuestras elecciones.
Pensamos, con frecuencia, que los errores son un fracaso, pero, en realidad, podemos verlos como una herramienta valiosa que nos permite aprender, crecer, hacer cambios y superar las limitaciones.

Cuando dije


Dije.no me importa cuando si importaba.
Dije, ya paso,cuando me seguía doliendo.
Dije, perdón cuando la culpa no era mía.
Dije, no pasa nada cuando pasaba de todo.
Dije, estoy bien cuando estaba partida en mil pedazos.

Recuerden siempre, no vender la felicidad

Recuerden siempre, no vender la felicidad, dónala, entrégale, regala...
Aunque la felicidad no tenga una fórmula sencilla ni barata y cuesta trabajo encontrarla y los ingredientes sean caros...
Obséquiala!
Los ingredientes son, compartir lo que tienes, amar sin exigencias, perdonar sin cicatrices, aceptar sin perfecciones, agradecer lo que te dan...
¡Y no rendirte nunca!
Todo armonizado, de un poquito de miel, del mar un poquito de sal, de la vida un buen trozo de optimismo, de la imaginación, sueños, del dolor un poco de su raíz...
¡Y que la Fe esté echa de roca!
A veces no somos felices porque no sabemos cómo llenar nuestra copa,
porque no sabemos dar a la vida un máximo de calidad de tiempo
y rendimiento...
Porque miramos al mundo como un esclavo, al camino empedrado como un imposible, a la mala suerte como una sombra que nos persigue...
¡Y a nuestros ideales como algo inalcanzable!
No olvidemos que la mejor manera de ser feliz, es ocuparse de que otros lo sean...
Debemos dar mucho de nosotros mismo y la felicidad llegará.

No muestres tus raíces


No muestres tus raíces a quien está
acostumbrado a ver solo

flores.

A partir de ahora voy ha ser feliz

Y me desperté un día y dije:
"se acabó, a partir de ahora
voy ha ser feliz, en vez de

hacer feliz a los demás"

A veces, lo más bueno de la vida, no es lo más bello: es lo que se ama.


A VECES.
A veces, queremos decir tantas cosas pero no las decimos…
A veces, se nos va el tiempo, en discusiones sin sentido…
A veces, en vez de decir cuánto amas, te la pasas diciendo tonterías…
A veces, pierdes a la persona que más amas, por no tratar de entenderla…
A veces, es bueno decir te amo, en vez de decir otras cosas…
A veces, es bueno pedir a Dios amarte más y que me entiendas mejor…
A veces, las mañanas no son, como quisieras que fueran…
A veces, el sol no brilla como quisieras y tus días son grises…
A veces, la luna no las ves y tus noches son oscuras…
A veces, hay que tener paciencia, con la persona que dices que amas…
A veces, nos ciega la ira y ofendemos sin querer, a quien más amamos…
A veces, es bueno pedir perdón, si sabes que has ofendido…
A veces, es bueno dar gracias a Dios por tenerte…
A veces, es bueno decir una plegaria a Dios, dando gracias…
A veces, es bueno decirle a un amigo cuanto le extrañas..
A veces, es bueno ver los defectos tuyos antes que los ajenos..
Por eso yo te digo..
Que me perdones por todos, esos momentos
que no disfrute de ti, por andar en discusiones tontas.
Quizá olvidaremos, pues hay que olvidar y perdonar.
Que el sol hoy, está alumbrando este día más que nunca.
Que mi noche es clara, porque la luna está dando su luz.
Que mi Dios escucha mis oraciones y está siempre conmigo.
Porque si la vida es tan corta, me la tengo que pasar peleándome con todos los que me rodean?
Por qué no disfrutar de esos momentos, que son tan pocos, que viven en ti y te dan esa energía que necesitas, para luchar en la vida por lo que quieres?
¿Porque no sonreírle a la vida?
Porque no rodearme de amor, así la vida la veo de otro color, y las penas son menos y los dolores se curan más rápidos.
Por eso hoy le abriré mis brazos a un amigo, sin ver sus defectos.
A veces, lo más bueno de la vida, no es lo más bello: es lo que se ama.
A veces, es bueno decir estas palabras.
Hoy es un día que quiero decir esas palabras.

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