google.com, pub-5586298736741103, DIRECT, f08c47fec0942fa0 Sueños de Amor Y Magia

viernes, 22 de abril de 2022

BUENOS DÍAS


 "Ahora sé que vivir un día a la vez es remar contracorriente, dejar atrás lo que un día me dio duro. Dejar de pensar en lo que aún no llega, en los tal vez, en los quizás, en las emociones y sentimientos que aún no existen, de lo que se quedó en el camino y los pasos que no he dado.
Ahora sé que vivir un día a la vez es dejar de darle ideas al tiempo. Dejar de pensar en lo que pudo haber sido. Dejar de ser cruel y dura conmigo. Romper lo que duele. Dejar de besar al futuro que aún no nace para olvidar al pasado. Quitarme la inútil costumbre de pararme con un pie en lo que ya fue y el otro en lo que aún no existe. Dejar de resignarme y adelantarme.
Ahora sé que vivir un día a la vez, es dejar de creer en todo momento que el tiempo pasado es mejor que el presente y que el futuro será mejor de lo que hoy estoy viviendo.
Deseo comenzar a vivir cada fracción de segundo. Tener la voluntad para vivir el hoy. Del ayer solo guardar la sabiduría y los buenos recuerdos que alimentan. Tener la paciencia, fe y entendimiento para dejar de desperdiciar el tiempo solo en recordar y planear y comenzar a vivir más. Dejar el agobio y recordar ser feliz.
Ahora sé que cada vez que un instante me abrace es para recordar que el mejor tiempo es el hoy, el momento de hacer, de ir, de aplicar lo aprendido, de disfrutar y reír más. Es la hora de entender que el ayer y el mañana es un tiempo inexistente. Es vivir el aquí y ahora sin culpas, sin preocupaciones. Que vivir en paz, perdonar el pasado, valorar y agradecer el presente es VIVIR UN DÍA A LA VEZ ".
®️Marcela J. Villalón

jueves, 21 de abril de 2022

El amor de Dios permanece firme


 Bendito eres mi Dios Amado, mi alabanza es para ti, Gracias Señor por ser tan bueno Conmigo y regalarme este dulce y bello día, siento tu grandeza en mí, tu mundo en mi ser, estás vivo y vives en mí.

Mi señor a veces no me siento digno de ti porque en buscar la perfección ante tus ojos cometo errores que me alejan de ti, sé que el mundo me puede hacer perder lo que he ganó bajo tu guía y amor, pero hoy te pido que me enseñes a escucharte cuando me guías, que si me desvío tú me tomes de la mano y me vuelvas a encaminar, porque reconozco señor que no soy nada sin ti.

Deseo señor con todas las fuerzas de mi corazón que tú voluntad siempre se haga en mí, que aun resistiéndome al cambio tu obres de manera perfecta en todo lo que haga a partir de hoy y por siempre, sé que estaré bien porque tú cómo mi padre harás que sea cada día mejor.

Gracias Padre por escuchar mi súplica y llevarme de tu mano, Gracias Señor por hacer de mi corazón tú templo. 

No hay un Dios como tú, que borra la falta y que perdona las fallas; que no se encierra para siempre en su enojo, sino que le gusta perdonar. 

Gracias señor Gracias. Amén

Gozar la vida

 


Tú ya no tienes muchos años para vivir, y además no podrás llevarte nada cuando te vayas, por lo cual debes ser ahorrativo, pero sin sacrificar tu bienestar.
Gasta el dinero que deba ser gastado, disfruta lo que deba ser disfrutado y dona lo que te sea posible.
No te preocupes por lo que pasará cuando te hayas ido, porque cuando te vuelvas polvo, no sentirás si te alaban o te critican, si te visitan al cementerio o te olvidan.
El tiempo para disfrutar la vida es este momento y los bienes que tan difícilmente ganaste debes gozarlos.
No te preocupes mucho por tus hijos, porque ellos tendrán su propio destino y encontrarán su propio camino.
Cuida en especial a tus nietos, ámalos, consiéntelos y también trata de disfrutarlos mientras puedas.
Despiértate diariamente a disfrutar un día más de vida sin peleas con nadie ni rencores.
Los hijos aunque se preocupen por sus padres, también estarán continuamente ocupados con sus trabajos, sus compromisos y con su propia vida.
Muchos hijos que no se preocupan de sus padres, pelearán por sus bienes aun cuando todavía estén vivos y desearán que pronto dejen esta vida para poder heredar sus propiedades y riqueza.
Si ya tienes 65 años o más, no cambies tu salud por riqueza trabajando en exceso, disfruta de los años que te quedan de vida. 
¡¡¡Vive feliz!!!
De cien hectáreas sembradas de arroz, solo puedes consumir 1/2 taza diaria, y de cien mansiones, solo necesitas un espacio de 8 m² para descansar en las noches, así que si tienes alimento y algo de dinero para tus necesidades, no necesitas más.
No te compares con otros midiendo tu fama, tu dinero o tu status social, o ufanándote por ver los hijos de quién tienen más éxito, y en lugar de eso reta a tus hijos a que logren felicidad, salud, gozo, calidad de vida y unión familiar.
Crea tu propio bienestar y encuentra tu propia felicidad haciendo cosas que te diviertan y alegren diariamente.
Teniendo buen ánimo, la enfermedad se curará, pero teniendo un espíritu alegre, la enfermedad se curará más rápido, o nunca se acercará.
Con buen carácter, adecuado ejercicio, alimentos sanos y un consumo razonable de vitaminas y minerales, tendrás vida saludable y placentera.
Pero sobre todo, aprende a apreciar la bondad en la familia y amigos, pues ellos te harán sentir joven, reviviendo los buenos momentos y los pasajes interesantes de tu vida.
El tiempo y las oportunidades son como el agua de un río que nunca podrás tocarla dos veces, porque ya pasó y nunca pasará de nuevo.
Aprovecha cada minuto de tu vida y no rechaces las oportunidades de conocer el mundo y disfrutar las cosas buenas de la vida, pues es posible que no se vuelva
a presentar.
No busques a la persona perfecta, porque esta no existe.
Busca si lo deseas a alguien que te valore como persona y si no la hallas, disfruta tu soledad que es mucho mejor que una mala compañía.
Cree en Dios. 
Trata de gozar la vida que es muy corta, disfruta de la familia y los amigos, pues te irás tarde o temprano de este mundo, aprovéchalos ahora.
¡Que la salud, el amor, la felicidad y la bendición del Señor, te acompañen siempre!
- Créditos a quién corresponda. 

Tener carácter


 

RESUCITAR

 


RESUCITAR ES:
Volver a vivir al encontrar la risa que perdimos con las prisas. Entre herida y herida, al encontrar la salida de un laberinto dibujado en la piel. Resucitar en el “me atrevo” de un cobarde, en las cuerdas del penúltimo asalto, en la respuesta de una pregunta arriesgada. Resucitar al dejar de disimular, al respirar sinceridad, al ignorar a los que no saben querer. Resucitar y dignificar la palabra dignidad. 
Resucitar con los ojos llenos de libertad. Volver a vivir después de matar las penas a cañonazos, después de las bombas de relojería, después de los pasos mal dados, de aquella partida que nos hizo partir al tirar los dados y perder. Volver y jugar, que solo gana el que juega otra vez. Resucitar cuando le veo de lejos y le imagino de cerca, tan de cerca que se me encienden los suspiros. Apaga y vámonos, chaval, vamos a morir en cualquier rincón de mi imaginación o de mi habitación. Que me muero por resucitar en tu regazo. 
Resucitar en la última vida de un gato, en la primera vía del tren, en renglones torcidos, en estaciones tardías y en bares vacíos. VOLVER A VIVIR después de morir de ganas, de miedo, de envidia, de sueño, de gusto… de amor. 
Resucitar después del después. 
PD.1. Dejarlo todo atrás y resucitar.
PD.2. Y hay que hacerlo YA. 

Si me necesitas hijo


 

Confiar


 

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