A veces cuando la lluvia te acompaña, en tus silencios, en tu meditación, en tus pensamientos, en tus días y en tus noches. Somos lluvia, nos convertimos en ella; lagrime-antes, acarician-tes, vigorosos, pausados. Refrescándonos las ganas de vivir, nos vuelve nostálgicos, nos libera, nos purifica.
Y Ahora, mientras llueve, en que piensas ?
