Dejar de culpar a la vida

 

Él no te dejó porque ella era más bonita.
No, no te dejó porque ella era más joven.
No, no te dejó porque subiste un poco de peso.
No, tampoco te dejó porque te crees aburrida.
No te dejó por ser como eres, ni porque fueras una carga en su vida.
Tampoco te dejó porque eres enojona.
Ni mucho menos te dejó por todo lo que te culpó antes de irse.
Él no te dejó de hecho,
Él se fué en realidad porque tenía que irse.
Y porque aunque hoy te duela, esto te ayudará a que por ti misma seas realmente amada.
Porque tú, querida, mereces lo mejor.
Aunque aún no te des cuenta y aunque ahora te parezca ilógico, en el fondo tú querías que se fuera.
Porque siempre lo sentiste, porque siempre te quedabas con ésa sensación de que algo no estaba bien.
Pero aveces tenemos tanto miedo de perder que sólo nos aferramos a lo que está.
Tú le diste mucho, todo lo que le diste se lo diste con ganas.
El te dió y enseñó muchas cosas, hónralo! 
Y por aquello que entre ustedes no fué bien, déjale su parte y quédate la tuya 
Y deja ése amor en paz. 
Y recuerda esto siempre:
Déja de culpar a la vida, al destino, asume lo tuyo, deja lo que no es tuyo y sigue tu camino, porque en realidad él no te dejó, se dejaron porque éste ciclo se cerró para dar paso a uno distinto, uno mejor.
Créditos a su autor.

No permitas que no te dejen crecer

 

No hace falta que sonrías para nadie, 
ni que te levantes cada mañana,
con el fin de agradar a la gente.
No ocultes lo que sientes,
no hace falta que finjas, si estas mal, 
ni que disimules tu felicidad.
No permitas ser la burla de nadie,
no consientas que nadie te aparte,
que nadie te humille,
ni que nadie te apague.
Nunca dejes que te pisen,
que te quiten las ganas,
la calma, ni los sueños.
No dejes que te impidan crecer,
porque nadie tiene tan limpio su pasado,
como para juzgar el tuyo.
FernandoGarcia

Confío en que alguna vez vean lo que di

 

Espera la venida del Señor

 

Buenos días

 

¡¡¡Buenos días!!!...
Se necesita poco para tener un buen dia, un rayo de sol en el cielo, una sonrisa en el bolsillo y una esperanza en el corazón.

Decían

 

Piensa en la suerte que tienes

 

Hoy piensa en la suerte que tienes de tener lo que tienes.

 El techo, la cama, tus cosas, tus ganas. Piensa en el apoyo de toda esa gente que te ama, piensa en las sonrisas de tus amigos, en los consejos de tus papás. En las estrellas en el cielo 

y en lo que das, piensa, que hay mucho más para agradecer que para reprochar.