Señor mío, Dios de la Paz, en tu bendita promesa me has dicho que estarás conmigo en todo momento de mi vida, ahora quiero que estés en mi descanso, en el silencio de este momento de intimidad, ahora que me dispongo a descansar. Tú eres la luz de mi vida, la razón de mi corazón. Bendito seas en esta noche que me estás inundando de Ti. Que todo lo que viva esté siempre motivado por una búsqueda de tu voluntad.
Sé que me amas y nunca me reclamas por mis errores, no guardas rencor, no te llenas de resentimientos, del mismo modo quiero estar tranquilo, ser feliz, tener paz, por eso sé que necesito aprender a perdonar, a dejar que las heridas se sanen. Quiero descansar en Ti esos ataques de ira que tanto daño hacen. Que tu luz nos ilumine para saber controlarnos.
Tú eres la luz de mi vida, la razón de mi corazón. No sólo eres luz sino el descanso para los que estamos agobiados.
Te pido que me des fortaleza, y que me hagas libre. Hoy me pongo en tus manos y sé que seguirás actuando en esta noche, dándome tu bendición,
llenándome de Ti, mostrándonos tu poder. Te pido que guíes mis pasos, pues sé que no tendría sentido caminar por la vida si no estuvieras a mi lado.