Te doy gracias

 

Amor propio 
Y decidí no hablar más de ti 
No imaginarte 
No pensarte 
No soñarte 
Como si de borrar cada recuerdo se tratase 
He decidido elegirme a mi 
Darme todo el amor 
Que una vez di para ti 
Escogí ser mi prioridad 
Ser mi punto y final
Sin respetar comas ni espacios 
Sin dar tiempos ni brevedad 
Intente buscarte 
Anhele tenerte 
Desee impregnarme 
De tu ser 
Soñé quedarme y jamás perderte
El día de hoy puedo decir 
Que logre tenerte 
Pude amarte ...
Que jamás te perdí 
Me perdiste tu a mi 
Y así poco a poco todo lo que di por ti 
Ahora lo reservo para mi 
Gracias te doy por haber llegado a mi vida 
A enseñarme lo que no merezco 
A mostrarme cuanto valgo ...
Es mucho más que amor 
Me enseñaste que necesito más respeto 
Aumentaste mis estándares 
Me hiciste priorizarme 
Y que no puedo mendigar amor 
A quien no quiere quedarse.
Gema carranza.

Archívame...

 

Archívame...

Archívame en la carpeta de tus olvidos, donde mi nombre solo sea una sospecha, quizás una suposición...

Déjame en ese espacio en el cual tanto miedo sientes que no necesites, ni debas volver a cruzar...

Aléjame de tu mente, de tu alma, de tu vida, cómo lo haces ante mis llamadas a tu vida.

Entiérrame y debajo de tanta tierra en la inscripción un N.N dejas para que nadie sepa quién fui en este mundo, quien fui en tu vida.

Ahógame en ese mar de silencio para que no encuentre bote salva vidas y el peso de mi propio espacio me sumerja con tal intolerancia que no me permita continuar con vida.

Aléjame de ti tanto como puedas, más por qué solo dolor he causado en tu vida, lágrimas a tus ojos y muchas mentiras según a ti, por mis dichas.

Desaparece de tu alma mi imagen, y que cuál hay hoja en blanco se quede como si hubieses dormido con tal fuerza, que fue quizás una pesadilla la que te acompaño en este tiempo, de agonía y guerra.

Dangeluz

Colombia

Si lo ven por ahí

 

Te amo sin tiempo ni espacios...Con el alma y la vida...Te amo hasta allá donde no existe el olvido.

Eterno es el olvido

 

Me olvidaste

 

Me has dejado olvidada

en algún rincón de tu memoria,

llena de ese pequeño y fino polvo

que se va acumulando con los años.

     Yo era tu niña mimada la que le 

aguantabas berrinches y dramas millón.

    Que en muchas ocasiones te hizo reír,

rabiar y quizás en algún momento sentir tu

sangre arder.

    Ahora no soy nada, algo que se desvanece,

que ya estorba, que te hastía.

     No le puedo echar la culpa a ella, 

porque antes de ella había alguien,

antes de mí también.

    Dirás que son celos, 

que estoy loca.

    Pero se te olvida que a veces no hacen

falta palabras.

    Que lo sientes, lo percibes, en los silencios

en la indiferencia.

      No lloraré.

Pero no sigas insistiendo en mí locura.

    Mejor déjame ahí,

en ese rincón entre el polvo y el 

olvidó...