Déjame envejecer sin compromisos y cargos,
Sin la obligación de parecer joven y ser hermosa para alguien,
Quiero a mi lado quien me entienda y me ame como soy,
Un amor para compartir tropiezos de nuestro último viaje,
Quiero envejecer con dignidad, con sabiduría y esperanza,
Amar mi vida, agradecer por los días que aún me quedan,
No quiero perder mi tiempo precioso con aventuras,
Pasiones perniciosas que nada añaden y nada valen.
Déjame envejecer con cordura y juicio,
Con la certeza que cumplí con mis deberes y mi misión,
Quiero aprovechar esta paz merecida para descansar y reflexionar,
Tener amigos para compartir experiencias, conocimientos,
Quiero envejecer sin temer a las arrugas y a mis canas,
Sin frustraciones, terminar la etapa final de mi existencia,
No quiero dejarme llevar por apariencias y vanidades tontas,
Ni involucrarme en las relaciones que me harán infeliz.
Déjame envejecer, aceptar la vejez con tal como es. Asegurarme de que mi lucha no fue en vano: tuvo un sentido,
Quiero envejecer sin temer a la muerte y temer a la despedida,
Creer que la vejez es el regreso de un viaje, no es el final,
No quiero ser un ejemplo, quiero darle un sentido a mi vivir,
Tener serenidad, un sueño tranquilo y caminar con la cabeza alta,
Hacer solo lo que me gusta, con la sensación de libertad,
Quiero saber envejecer, ser una vieja consciente y feliz!
(Concita Weber)