Necesito de Ti para afrontar el día de mañana que, en fe, me vas a regalar y así luchar con lealtad a Ti. Te pido que, a través de mí, te sigas manifestando y que sea presencia de tu poder en la vida de los que están conmigo. Necesito que estés en mi corazón, con eso me basta para tenerlo todo y poder ser feliz.
Te suplico que sanes las heridas que hay en mi ser, que sepa vivir en paz con todos y genere siempre las mejores actitudes. Dispón de mi humilde corazón para que sea dócil a tu voluntad. Te pido que vengas a mí y me llenes de todo tu ser. Te amo y te entrego esta noche y el día de mañana. Amén