Yo igual que tú, también lloré y maldecí, caí y me levanté, confié y me fallaron.
Me alejé y nadie me buscó.
Yo igual que tú, dejé de creer en las personas, en el amor y las promesas. Dejé de soñar y se me apagó la sonrisa.
Yo igual que tú, he sentido la soledad a flor de piel y el frío vacío por dentro que eriza el alma.
Tú igual que yo, también puedes perdonar y volver a volar en otros horizontes, en otros cielos.
Florecer en la próxima primavera, con otro color y en otro jardín.
Créditos a su autor
Me alejé y nadie me buscó.
Yo igual que tú, dejé de creer en las personas, en el amor y las promesas. Dejé de soñar y se me apagó la sonrisa.
Yo igual que tú, he sentido la soledad a flor de piel y el frío vacío por dentro que eriza el alma.
Tú igual que yo, también puedes perdonar y volver a volar en otros horizontes, en otros cielos.
Florecer en la próxima primavera, con otro color y en otro jardín.
Créditos a su autor