Te doy permiso para romperte.
Para tener un día de esos en los que no se hace nada en todo el día.
Acuéstate y sufre un poquito, anda, te doy permiso.
Llora que sé que tienes ganas de hacerlo.
Quieres ser frágil un momento.
Colgar las alas y recuéstate un poco.
Hace tiempo que no pasas tiempo contigo, a solas.
Convive contigo.
Reclámate.
Júzgate.
Llámate imbécil.
Conversa contigo hasta que te entiendas mejor.
Reclama con furia y con los ojos empapados.
Reclámate.
Te doy permiso para romperte... Pero no para rendirte.
Así que rómpete bonito.
Rómpete como las mejores.
Sé la mejor en el arte te romperse a uno mismo.
Mañana temprano juntas tus piezas del suelo, te secas las lágrimas, tomas tus alas y recalibras el vuelo.
Mañana sal a la vida como si nada hubiese pasado.
(José Rodríguez)