Páginas

Páginas

Páginas

Páginas

martes, 25 de febrero de 2020

Nunca dejar de agradecer

El crecimiento y la evolución ocurren durante las tribulaciones
Aquellas situaciones difíciles que ustedes viven y que algunos llaman problemas, tribulaciones o retos, en realidad son las verdaderas oportunidades que necesitan para manifestar la genuina naturaleza espiritual que sobrepasa todo asunto terrenal.
Cuando un barco navega sobre aguas tranquilas, no hay ninguna acción especial que el capitán deba realizar –solo navegar en la quietud de esas aguas.
Pero cuando llega la tormenta, cuando las aguas se levantan y el barco está en riesgo de perder el rumbo, es entonces cuando el capitán debe estar alerta y darse cuenta de los cambios que necesita hacer para dirigir el barco, pues de lo contrario podría desviarse de su curso o incluso hundirse entre las olas.
Esos momentos de tormenta les dan las oportunidades para crecer y aprender, para fortalecerse y recordar quiénes son.
Cuando enfrentan una tribulación, muchas personas se vuelven hacia el Padre-Madre y nuevamente se comunican con Él. Es cuando muchos vuelven a creer en los milagros, pues piden con fe la solución a sus necesidades.
Confía en que cada situación que parece complicada, cada experiencia que vives en la Tierra y que parece ‘no tener salida’, es en realidad un regalo para ti. De esta manera podrás atravesar esa situación, y así crecer y evolucionar.
Por lo tanto, es importante que nunca dejes de agradecer al Padre-Madre. Siempre agradece, no solamente en los momentos de quietud y estabilidad, sino también en los momentos de tormentas y tribulaciones, pues al pasar esa tormenta habrás adquirido progreso en tu evolución.